A veces en El Remolino, celebramos días especiales, días en los que salimos de la rutina, dejamos los talleres un poco de lado y hacemos actividades centradas en la temática elegida para el verano.
Ya os contamos en otro post que este verano la temática estaba relacionada con la comunicación y expresión.
Por eso cuando preparamos el día especial se nos ocurrió centrarnos en los beneficios del silencio y de manera general trabajar la intensificación del resto de sentidos cuando nos vemos privados de uno de ellos.
Con esta base celebramos el Día del Silencio, donde unos monjes cartujos nos explicaron los beneficios de conocer y relacionarnos con el medio y con los compañeros y compañeras evitando el ruido que puede distraernos de fijarnos en detalles que pasan desapercibidos, escuchar los sonidos que nos rodean, vivir de manera más relajada y disfrutar de los pequeños detalles del día a día.
¡¡¡Y cómo disfrutaron estos niños y niñas!!!
El día acabó con todos los chicos y chicas tumbados en las escaleras alrededor del tótem cantando bajito mientras veíamos cómo las estrellas fugaces cruzaban este cielo de ensueño, una experiencia increíble que no vamos a olvidar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario