Y claro, así aprender, resulta mucho más divertido.
Y en los juegos nocturnos no puede ser menos, también tenemos a nuestros personajes que solo hablan inglés y vienen buscando la ayuda de nuestros niños/as.
El hada Hope vino desde el mismísimo Central Park de Nueva York de vacaciones, y claro para poder comunicarse en nuestro idioma necesitaba un conjuro.
Aunque todas las pruebas fuesen en inglés y al principio la comunicación nos costara bastante, al final conseguimos que el hada hablase nuestro idioma, pero que nosotros aprendiésemos muchísimas palabras en el suyo.
Una noche muy internacional. Que terminamos cantando cumpleaños feliz a nada más y nada menos que cuatro de nuestros remolineros/as.
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