Todos sabéis que las labores del huerto son bastante duras pero da mucho gustito ver cómo el trabajo duro da sus frutos, y eso es lo que ocurre en nuestra huerta.
Los chicos y chicas trabajan la tierra, arrancan malas hierbas, riegan, siembran, limpian el invernadero, cuidan los plantones, revisan las plantas para saber si existe alguna plaga y por supuesto recogen lo que la huerta nos va ofreciendo.
Es un trabajo duro, pero uno de los más bonitos, aunque no os preocupéis porque cuando aprieta el calor, también nos regamos a nosotros mismos o pasamos a trabajar en el aula, con el calendario de verduras.
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